Manta extensiva hecha de fibras naturales, elaborada en el noroeste argentino. Durante la producción, se teje a máquina y se procesa a mano.
Esta manta esponjosa y robusta con aspecto de franela forma parte de nuestra línea ecológica de mantas hechas de colores naturales. El color elaborado y seleccionado a mano de las fibras hace de este producto una pieza artesanal favorita exclusiva, que va desde el blanco cremoso hasta el gris, pasando por el beige y los tonos marrones.
Por supuesto: nuestras mantas sin colorantes artificiales.
Las características positivas de estos nobles productos naturales, así como el uso de colores naturales como base de nuestra colección, no solo significan dar a nuestros productos un valor añadido, sino también aumentar la calidad de nuestros productos haciendo que duren aún más y sean especialmente respetuosos con la piel.
Las llamas provienen de los valles montañosos de los Andes en Argentina hasta una altitud de unos 4000 m y son mantenidas por pequeños productores y agricultores. La esquila se realiza manualmente con tijeras especiales para el bienestar de los animales, a diferencia de las máquinas. La fibra de los productores es comprada en los mercados regionales por la Asociación Warmi Sayajsunqo, respetando el comercio justo.
Respetuoso con el medio ambiente – esponjoso – cálido – robusto
La llama es una fibra resistente y elegante. Esta fibra es ideal para el invierno ya que tiene un tacto muy suave. Otras características especiales de esta preciosa fibra son hipoalergénica, cálida, esponjosa, tiene excelentes propiedades aislantes y también tiene un efecto regulador de la temperatura. Otra ventaja es que la alpaca tiene un bajo impacto ambiental en comparación con otras fibras naturales (biodegradables).
